Las cinco gamas cromáticas para vestir tu dormitorio

¿Te pasa horas viendo artículos de revistas? ¿Miras Pinterest sin parar y al final no sabes cómo decorar tu cuarto? Hoy en el blog te vamos a hablar de cinco paletas cromáticas que funcionan a la perfección. 

Por un lado, vas a conseguir un dormitorio mucho más acogedor y, por otro lado, te atreverás a mezclar estampados y colores. Si no quieres que tu cama pase desapercibida, ¡toma nota e inspírate con las propuestas! 

El beige y los blancos, la base de los dormitorios minimalistas

Desde el estilo minimalistas hasta los ambientes más slow están presididos por tonos blancos y beiges. Esta combinación es perfecta si queremos ambientes acogedores, pero no tenemos mucho espacio en casa o la luz es escasa. 

 

En la imagen la funda nórdica de cuadrado pequeño

Son ambientes atemporales y puedes apostar por materiales naturales como el algodón percal en sábanas y fundas nórdicas. Por supuesto, vamos un paso más allá y te animamos a probar con estampados como el vichy en beige o la colección étnica con toques más oscuros. 

En la imagen la funda nórdica blanca de algodón percal 

En el capítulo de cortinas y visillos, tu mejor elección son las blancas y en tonos crudos. En este caso, elige una medida mayor a la que requiere tu ventana para que tenga más onda y la caída tenga un aire boho. 

Verdes, la naturaleza en tu dormitorio 

Florecitas, enredaderas y estampados muy suaves en este estilo decorativo. Aquí la clave está en mezclar los dibujos botánicos con sábanas de algodón en blanco o beige. 

En la imagen la funda nórdica topos verdes

En las paredes para completar el estilo busca papel pintado con textura neutra o imitación a la piedra. De esta forma, vestirás la cama con nuevos tonos y el papel no solo va a proteger tus paredes, sino que consigues un ambiente más acogedor. 

Amarillo y mostaza, colores para los 365 días del año

El amarillo y el mostaza son dos tonos que transmiten optimismo y te funcionan igual de bien en el cuarto de los más pequeños como en el tuyo. La clave está en darle protagonismo. 

Funda nórdica rain Mostaza y cojines Face

Los más pequeños encuentran en la colección Urban varias fundas nórdicas, cojines y láminas para montar la habitación al completo. Por su parte, también cuentas con las opciones de fundas nórdicas de algodón en mostaza o el modelo Winter. 

En la imagen el juego completo de sábanas mostaza y la funda nórdica de algodón percal 

En tu cuarto el amarillo aporta calidez al blanco y combina genial con los tonos grises y fríos. 

Azules, desde los más fríos a los más oscuros 

Si leéis de forma asidua el blog de SOKIOS, sabéis que somos muy fan de los tonos azules en el dormitorio. Relajan la mente, funcionan genial en espacios pequeños y son fáciles de combinar. De hecho, ¡siempre quedan genial! 

En la imagen funda nórdica Kilim azul y el cojín Durban

En este caso, puedes combinarlos con visillos lisos en tonos rosas y ocres. Por el contrario, si te gusta la ropa de cama blanca, el visillo en azul puede cambiar por completo tu habitación. 

En la imagen los visillos traslúcidos Jeans

Si te gustan los azules intensos, siempre generan profundidad y quedan muy elegantes, utiliza las sábanas y fundas Mediterráneo y la cortina Lotus Petróleo. En este caso, deben ser protagonistas absolutos, por qué se llevarán todas miradas. 

Rosas y lila, mucho más allá de la primavera

Dentro de los tonos pasteles (sabemos que te encantan) queríamos destacar los rosas y lila. Lejos de parecerte cursis o solo aptos para dormitorios infantiles, ¡son muy elegantes! 

En la imagen la funda nórdica Rain y con los cojines MIX 

En el estilo nórdico se utilizan con mucha frecuencia, siendo sinónimo de elegancia. Si los usas con grises son el equilibrio perfecto entre serenidad y deco minimalista. 

 

En la imagen la funda nórica Maranta de la colección Paradise

Además de las opciones en liso, puedes elegir nuestra funda Rain Salmón en tonos salmón, los visillos en rosa suave o cojines con diseños como los de la colección Paradise. Tú decides si apuestas todo al rosa o lo mezclas con tonos más suaves como gris, blanco o beiges.