Tu cama de vacaciones
A las 5:32 minutos del 21 de junio el verano arranca. Por delante 93 días completos de calor, mucho sol y las ansiadas vacaciones. Si tienes la suerte de contar con una casa cerca del mar o la montaña y estás deseando hacer las maletas hacia tu segunda residencia, el post de hoy está escrito a tu medida.
Al pasar menos tiempo en la segunda residencia, solemos cometer dos errores que hoy vamos a corregir. Por un lado, no prestarle nada de atención a los detalles, lo que hace que sea una casa sin personalidad, poco acogedora y que parece un anuncio de portal inmobiliario.
En la imagen la funda Liberty en casa de Vontrueba
El segundo error es ir decorando la casa con lo que nos sobra de nuestra primera vivienda. En este caso, todo se verá fuera de tendencia y tendremos una decoración, que no atiende al entorno y a las necesidades de cada sitio.
¿Acaso es lo mismo una habitación con vistas a la montaña que otra en el centro de una ciudad?
Buscar dormitorios acogedores y muy cómodos
Antes de pensar si tu casa está en el mar o el monte, vamos a ver lo que une ambas localizaciones. ¡La búsqueda del descanso y la desconexión!
En la imagen la funda nórdica en color arena en casa de Alice Showroom
Aquí la tendencia slow gana puntos y se convierte en referente, es el momento de apagar el despertador y dormir profundamente. Por este motivo, como pautas generales en esta cama será imprescindible utilizar sábanas de algodón percal de 200 hilos, para sentir su tacto al acostarnos, contar con un buen colchón y si buscar algo neutro, apostando por tonos lisos y suaves.
Visillos en blanco en casa de Maiglesa
Al mismo tiempo, elige pocos cuadrantes y cojines, para conseguir una puesta en escena más sencilla. Por otro lado, las colchas son otro gran aliado, no solo para las noches de mucho calor, sino para utilizar a los pies de la cama, a modo de plaid.
En el mar, mejor tonos beiges y azules
Dejando al margen la necesidad de cargar las pilas, si tienes la suerte de contar con un dormitorio con vistas al mar, aprovecha sus colores para integrarlo mejor. Aquí los azules son la apuesta segura, desde las fundas nórdicas lisas hasta otras, también sencillas, como las Rain, de la colección Streamline.
En la imagen la funda nórdica Rain en azul celeste
Por otro lado, la mejor pareja de esas camas azules son toda la paleta de tonos beiges, tierra y ocres. Juega con ellos en los cuadrantes, las sábanas o los cojines. Por supuesto, sin pasar por alto otros detalles que visten tu cuarto como las cortinas o el papel pintado, este puede renovar la decoración de cualquier rincón en menos de 30 minutos.
El espíritu farm en tu casa de campo
Por último, desde el mar nos vamos directos a las casas en la montaña o entornos rurales. Además del paisaje, aquí el silencio te hará dormir mucho más y descansar al máximo.
En la imagen la colcha Mediterráneo
Para integrar tu dormitorio en el entorno lo ideal es recurrir a un estilo rústico renovado o campestre. Si vas a elegir mobiliario oscuro o cuentas con elementos arquitectónicos como vigas o suelos de barro, ¡la luz será tu prioridad!
En las ventanas apuesta por visillos sencillos que filtren la luz al máximo. De nuevo, dentro de la colección de papel pintado SOKIOS (se pega solo con agua) hay estampados como hojitas o pequeños dibujos de flores que darán ese aire que buscas al dormitorio, al salón o al recibidor.
En la imagen la funda nórdica de topitos verdes
Si aterrizamos en la cama, la colección Botánica está pensada para este tipo de camas. Si hace unas semanas os contábamos las claves del estilo farmhouse, hoy solo podemos reafirmar que sus estampados liberty, la delicadeza de los dibujos de Silvia Soler y los tonos suaves son tu mejor baza.
¿Estás deseando mudarte a tu casa de vacaciones? ¿Qué colores vas a elegir este año para vivir unos días de descanso slow?
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