Dormir para concentrarnos mejor

Los niños españoles se acuestan una hora más tarde que los europeos y madrugan más. Así de contundente se muestra el pediatra y especialista en sueño de la Universidad Complutense Doctor Pin. 

Este desfase está explicado por nuestro horarios tardíos y por la presencia de luz hasta altas horas de la tarde. Además, los estudios afirman que el 70% de los niños tienen dispositivos electrónicos en el cuarto, este porcentaje se dispara al 89% en caso de adolescentes. 

Lo analicemos como lo analicemos las cifras son preocupantes, puesto que un niño debería dormir 10 horas todas las noches para evitar problemas tan graves como la obesidad, diabetes, falta de atención, mal humor y apatía. 

Este año la vuelta a los horarios será más complicado, después de meses y meses sin madrugar la vuelta a la rutina será difícil,  así que vamos a ver algunas pautas que nos pueden ayudar. 

• Estable una hora de acostar fija, cuanto más regular sean todos los horarios será más fácil que se conviertan en hábito. 
  
  
• Adiós a la televisión, pantalla y otros dispositivos dos horas antes de acostarnos. Lo ideal sería cenar todos juntos sin tele y, luego, leer un ratito antes de apagar las luces.
  
  
• Aprovecha que las tardes se empiezan a acortar para bajar las persianas un poco antes, encender luces suaves y crear una atmósfera de relax antes de la cena.
  
  
• El baño es muy importante para los más peques, utiliza agua calentita, un pijama cómodo y crea un ambiente más silencioso.
  
  
• Intenta que los fines de semana se mantenga más o menos la rutina a la hora de irnos a la cama, sobre todo, las primeras semanas que les costará mucho más.
  
  
• El cuarto debe estar libre de móviles, tablet o cualquier aparato que emita luz azul.
  
  
• Elige ropa de cama suavecita y cómoda para que estén agusto. Para los más peques los sacos nórdicos son una excelente idea por que se mueven con libertad pero no se desarropan en ningún momento.