Cómo elegir el papel pintado perfecto para dar calidez a tu hogar

Al hablar de calidez no solo pensamos en sacos nórdicos, fundas o rellenos de mayor gramaje. ¡El papel pintado también es fundamental!

Vestir las paredes con tonos suaves, tierra o con textura hace que nos sintamos mucho mejor en casa. Una sensación de confort que te permite relajarte y sentirte siempre “calentita”.

Nuestros papeles pintados se colocan solo con agua —ya vienen previamente encolados—, así que son muy fáciles de instalar y, además, no ensucian nada.

Si buscas esa sensación de llegar a casa después de un largo día y encontrar tu refugio, te dejamos algunas ideas para transformar la decoración con papel pintado. Un cambio total, sin obras ni reformas.

1. Tonos tierra y neutros cálidos

Los colores naturales siguen siendo los protagonistas este invierno. Beige, arena, terracota o topo son perfectos para crear una atmósfera acogedora y relajante.

Combinan con cualquier estilo y aportan esa sensación de hogar que todos buscamos cuando baja la temperatura. Aquí los nuevos diseños en tonos vichy son perfectos, desde el granate, tonos oliva o beiges. 

2. Texturas que abrigan

Los papeles con efecto lino, tela o fibras naturales aportan profundidad y calidez visual. En dormitorios o salones, este tipo de acabados transforma las paredes lisas en superficies más ricas y envolventes, sin resultar recargadas.

3. Motivos botánicos y orgánicos

Las hojas grandes, flores delicadas o ramas en tonos suaves aportan vida sin saturar el espacio. Son ideales para mantener el vínculo con la naturaleza incluso cuando pasamos más tiempo en casa. Además, se integran muy bien con ropa de cama lisa o con pequeñas pinceladas de color.

4. Paredes protagonistas

No hace falta empapelar toda la habitación. Una sola pared puede convertirse en el punto focal del espacio. Detrás del cabecero, del sofá o en una zona de lectura, un papel pintado con personalidad cambia por completo el ambiente y aporta calidez inmediata.