Claves para dormitorios pequeños
Si tu dormitorio es pequeño, solo podrás optar por el blanco, decorarlo muy poco y recurrir a espejos para potenciar la luz. Aunque estas tres reglas son ciertas, son muy básicas.
En este post vamos a hablar de elegir muebles, colores y crear nuevos volúmenes para decorar tu cama sin aburrirte. Tener pocos metros cuadrados, nunca sea sinónimo de falta de color.
La clave siempre está en la cama
¿Pocos metros cuadrados? Prioriza lo más importante de tu habitación y busca una cama que sea más baja (ocupan menos espacio visual). Al mismo tiempo, las camas con patas permiten que el aire circule por abajo y le dan más aspecto de ligereza al conjunto.
La ropa de cama puede estar dominada por el color, pero mucho cuidado con pasarte con los elementos. En cuartos reducidos no vas a poder poner 4 cuadrantes, dos cojines, funda, colcha o plaid. Apuesta por una funda nórdica bonita, un par de cuadrantes que vistan el cabecero y unas sábanas en tonos suaves para hacer un embozo.
En la imagen sábanas hojitas en casa de Maiglesa
El punto focal, ¿cómo te llevas con los colores?
Si el cuarto es pequeño elige un único punto focal y poténcialo al máximo. Si te gusta cambiar mucho la decoración, el punto focal puede ser la combinación de cuadrantes y cojines sobre la cama, colocar un papel pintado en el cabecero o darle todo el protagonismo a una funda estampada. Lo importante es elegir solo un elemento que destaque y domine al resto.
¿Qué pasa con las mesillas?
Recuerda, siempre que estamos hablando de una pieza secundaria. Si hay poco espacio, pega la cama a una de las paredes y colocar una mesilla, Juega, también, con elementos como taburetes. A la hora de decorarla, sé ordenado e intenta dejar lo básico para no crear ruido visual.
Funda nórdica rayas azul