El secreto de las camas de invierno, ¡toma nota!
Que el despertador suene un poquito más, querer acostarnos antes o dormir más horas el fin de semana... No lo decimos nosotros, numerosos estudios apuntan que en invierno dormimos más horas.
Al atardecer pronto llevamos un ritmo de vida más lógico. De esta forma, cenamos antes y nos vamos a la cama con tiempo suficiente para un sueño reparador. Por supuesto, además de las horas de luz estamos influenciados por las camas mullidas y calentitas que apetece más que nunca.
Si tú también adoras la camita en invierno, te mostramos tres formas de montarlas y asegurarte las mejores noches del año arropadita.
Fundas nórdicas, relleno gordito y cero peso
Uno de los grandes atractivos de las fundas nórdicas es que puedes elegir rellenos de 250gr y 350 gr sin que haya mucho peso. Seguro que si tienes unos años recuerdas esas camas de tres mantas y edredón que eran hasta incómodas por el peso.
En nuestro caso, las fundas nórdicas tanto de adulto como para niños tienen un doble tejido. Por un lado, la parte estampada que fabricamos en micro poliéster, con un tacto maravilloso y, por otro lado, algodón percal de 200 hilos con el tacto de las mejores sábanas del mundo.
Las fundas nórdicas en SOKIOS tienen un largo especial para que puedas hacer la cama de varias formas. Metiéndolas por debajo del colchón para evitar desarroparte o más largas cubriendo las patas de la cama.
Los edredones calentitos
Los edredones son una gran opción las noches de invierno, de hecho los podemos elegir a modo de plaid o combinados con las fundas nórdicas.
Los edredones tienen un relleno de 250 gr que se aconseja para habitaciones entre los 16 grados y los 22, más o menos la temperatura media de nuestro hogar si tenemos calefacción.
Los edredones están diseñados por nosotros con todo nuestro mimo y diseño reversible, así puedes decorar con ellos y cambiar tu cuarto. De hecho, nos encantan los edredones con un embozo amplio para ver los dos estampados.
Sacos nórdicos para los más pequeños de la casa
Los sacos nórdicos son una auténtica revolución para los más pequeños de la casa. Los sacos se hacen a medida y están pensados para camas tipo Montessori o nido, puesto que se hacen muy rápido y la cremallera hacen que sean más cómodas.
Los sacos están confeccionados con un muelle que permite el movimiento de los pequeños, mientras que siempre están arropados y tú tranquila porque ellos pasan toda la noche calentitos.
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